Se ha anunciado una noticia innovadora en Texas. Una nueva ley que establece un fondo de criptomonedas ha entrado en vigor. Ahora las monedas digitales, especialmente Bitcoin, cuentan con un entorno para crecer y prosperar.

El 21 de junio, el gobernador Greg Abbott firmó la ley de la Reserva Estratégica de Bitcoin de Texas, previamente aprobada por el Congreso de EE.UU. Según el documento, Texas es el primer estado estadounidense cuyo gobierno está ahora autorizado para invertir fondos públicos en BTC y otros activos digitales con el fin de: 1. reducir los riesgos financieros derivados del aumento de la inflación; 2. proteger contra la inestabilidad económica; y 3. aumentar la resiliencia financiera del estado de Texas.

La regulación permite a los funcionarios adquirir criptomonedas, aunque bajo una condición particular: la capitalización de mercado promedio de dichos activos durante los últimos dos años debe ser de al menos $500.000 millones. Actualmente, solo Bitcoin cumple este requisito, con una capitalización de mercado que supera los $2 billones.

Ethereum, que ocupa el segundo lugar en capitalización de mercado entre los activos digitales, tiene un valor total estimado de $277.000 millones. En estas circunstancias, el gobierno de Texas no invertirá en ETH ni en otras monedas digitales menos rentables.

La nueva iniciativa en Texas ha provocado una oleada de comentarios entre los entusiastas de las criptomonedas, muchos de los cuales han sido pesimistas.

“La mala noticia para Texas es que ha entrado en vigor la ley que crea un fondo estratégico de Bitcoin administrado por el estado. La buena noticia es que el estado tendrá prohibido comprar Bitcoin si su capitalización de mercado cae por debajo de los $500.000 millones,” comentó Peter Schiff, un conocido crítico de las monedas digitales.

Sin embargo, para que la capitalización de mercado de Bitcoin caiga por debajo de los $500.000 millones, su precio tendría que reducirse a una cuarta parte. En la actualidad, BTC se cotiza a $106.930, lo que hace que la sombría predicción de Schiff sea muy poco probable. Además, para que el gobierno de Texas deje de comprar Bitcoin, su precio tendría que caer por debajo de los $30.000, algo que parece poco realista en el futuro cercano.